La inteligencia emocional implica tanto el conocimiento como el manejo de nuestras emociones. Su importancia radica en que nos permite expresar las emociones de forma sana y satisfactoria, facilitando la comprensión de nuestras propias intenciones, motivaciones y deseos, así como los de los demás.
Para los adultos, gestionar las emociones puede ser difícil en ciertos momentos. Para los niños y niñas, que carecen de experiencias previas y estrategias, esta tarea es aún más desafiante.
En ocasiones, encontramos niños y niñas con un manejo emocional prácticamente inexistente, que se muestran irascibles e irritables con frecuencia, tienen cero tolerancia a la frustración y responden de manera agresiva y hostil. Esto no sólo limita su capacidad para relacionarse e integrarse con sus compañeros y compañeras, sino que también puede afectar su salud. Investigaciones han demostrado que experimentar emociones negativas reduce las defensas del cuerpo, volviéndonos más vulnerables. Además, las personas con escaso manejo y tolerancia emocional son más susceptibles a caer en adicciones.
Es crucial que los niños y niñas aprendan a gestionar sus reacciones indeseadas. El enfado, castigo, los gritos no suelen ser efectivos; en cambio, hacerles reflexionar sobre lo sucedido de manera objetiva y constructiva es mucho más beneficioso. Aprender la importancia de sus acciones, su repercusión en los demás, y ofrecerles alternativas de conducta positivas mejora su manera de pensar y actuar.
Como dijo Benjamín Franklin: "Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo; involúcrame y lo aprendo."
¿CÓMO ES ESTE CURSO?
• Práctico: Proporciona herramientas que los niños y niñas pueden aplicar en su vida diaria.
• Transformacional: Aborda diferentes emociones con el objetivo de generar sentimientos positivos y promover el cambio en los niños y niñas.
• Participativo: El aprendizaje se basa en ejercicios vivenciales que incrementan las habilidades de comunicación emocional.
• Divertido: Los niños y niñas tienen la sensación de estar jugando todo el tiempo, haciendo el aprendizaje más ameno y efectivo.
¿CÓMO LO HACEMOS?
• Role Playing: Los niños y niñas adoptan diferentes "papeles" para practicar conductas asertivas y empáticas.
• Modelado: Observan comportamientos adecuados que les ayudan a resolver problemas sin agresividad.
• Dinámicas Grupales: Actividades divertidas que potencian la creatividad, aumentan la autoestima, fomentan el autoconocimiento, y promueven valores y respeto hacia sí mismos y los demás.
• Juego: El método de aprendizaje por excelencia, donde los niños y niñas aprenden a compartir, desarrollan la creatividad y aprenden a tolerar la frustración.
• Relajación: Se enseñan técnicas sencillas para ayudarles a gestionar sus impulsos de manera más efectiva.
• Brainstorming: Se crean espacios para desarrollar la imaginación y aprender a encontrar diversas soluciones a un problema.
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